En la última década, el panorama de las amenazas ha evolucionado rápidamente. Comprender los métodos cada vez más complejos con los que operan los actores de las amenazas es crucial para tomar decisiones informadas en materia de seguridad, riesgo y resistencia.
"En un mundo en el que todo el mundo está interconectado, las empresas tienen más oportunidades que nunca de prosperar. Pero donde hay oportunidades, también hay riesgos", afirma Michael Evans, director del Risk Intelligence Center (RIC) de Securitas.
Esto se ha hecho más evidente en los últimos años, con escenarios como las tensiones geopolíticas entre diversos actores mundiales que ponen de relieve estos retos. Aunque hoy en día se puede acceder a la información a través de muchas fuentes abiertas, el panorama de la información es tan volátil, incierto, complejo y ambiguo (VUCA, por sus siglas en inglés) como el paisaje, y también se ve cada vez más socavado por la propagación de la desinformación, la desinformación y la mala información.
La desinformación es la difusión intencionada de información falsa para promover programas específicos. La malinformación consiste en utilizar información verdadera con fines malintencionados, como el doxing, en el que se comparte información personal en línea. Estos riesgos aumentan a medida que las organizaciones y su personal, incluidos los ejecutivos, están cada vez más conectados al mundo online.
"El mundo va a seguir pasando, pero si utiliza los servicios de inteligencia estará mejor preparado, informado y en control. Eso significa menos posibilidades de interrupción, mayores oportunidades y la posibilidad de centrarse en lo que más le importa. También significa una mayor confianza no sólo de sus empleados y su organización, sino también de sus clientes, accionistas y partes interesadas", afirma Michael Evans.
Las oportunidades de la inteligencia
La inteligencia desempeña un papel fundamental en la gestión de riesgos y la identificación de oportunidades en un mundo conectado. Sin embargo, es esencial abordar la recopilación y utilización de inteligencia de forma responsable y estratégica.
"Al utilizar los servicios de inteligencia, obtendrá orientación para tomar decisiones. Esencialmente, tendrá ventaja en la toma de decisiones y el conocimiento y la evaluación de la situación necesarios para planificar y aplicar planes de contingencia. Esto le permite tomar decisiones proactivas en tiempo real o ajustar el curso de acción según sea necesario", afirma Michael, y añade:
"Esto se aplica al día a día, como la planificación de posturas de seguridad, a las decisiones típicas de la empresa, como la selección de un lugar para un evento, o a acontecimientos importantes, como la entrada en el mercado y los acontecimientos geopolíticos."
La amplia disponibilidad de datos e información implica que cualquiera puede recopilar inteligencia, pero la precisión, oportunidad y relevancia pueden variar. Una inteligencia fiable y creíble requiere experiencia en la materia, acceso a diversas fuentes y conocimientos del sector. La inteligencia práctica es crucial, ya que permite a las organizaciones proteger a su personal, sus instalaciones, sus operaciones y la reputación de su marca. Sin embargo, es crucial integrar la inteligencia en toda la organización y en todos los departamentos, para poder beneficiarse realmente de ella, afirma Michael.
"La inteligencia puede ayudar a romper silos. Los líderes pueden integrar la inteligencia en su negocio a través de las diferentes divisiones, departamentos y funciones, y encontrar valor para todos", afirma Michael. "Se trata de introducirla en todos los niveles de una operación y una organización, no sólo en los responsables de seguridad y la primera línea, no sólo en la C-suite".
